El potencial agotamiento de las fuentes convencionales de energía, como el petróleo, lleva al hombre a buscar fuentes de energías alternativas, como la energía solar, la energía geotérmica (de la tierra) y la energía eólica (del viento). Los recursos de las fuentes de energías alternativas son renovables, es decir, inagotables; además no producen contaminación ambiental, por lo que se denominan energías limpias.
El aprovechamiento de las energías alternativas, auque todavía presenta inconvenientes técnicos y costos elevados para un uso masivo, ha dado buenos resultados en algunos países, permitiendo un significativo ahorro del consumo de petróleo.
¿Cómo se produce el viento?
El viento se produce cuando hay una diferencia de temperatura entre el aire de una región y el de otra. Debido a su menor densidad, la masa de aire más caliente se eleva, dejando un espacio que es ocupado por la masa de aire frío. El viento es el resultado del desplazamiento del aire frío. El nivel de movimiento de las masas de aire es diferente; así, hay vientos suaves y otros violentos como los huracanes, cuya velocidad puede superar los 200 Km/h. La velocidad de los vientos está determinada por la cantidad de energía cinética de la masa de aire; cuanto mayor es la velocidad, mayor es la energía cinética que tiene el viento. A esta energía se le llama energía eólica.
Actualmente, las aplicaciones de la energía eólica se centran en la obtención de electricidad, la cual se genera en las centrales eólicas a partir del movimiento del viento. Estas instalaciones suelen ser amplias y cuentan con un tipo especial de molinos: las turbinas eólicas, aspas finas de rotación muy rápida. En paralelo el eje de las aspas, un mecanismo acciona un generador eléctrico que transforma la energía mecánica en energía eléctrica. Con una turbina eólica de 4,5 m de diámetro se puede conseguir almacenar unos 5000 kW/h de energía eléctrica; cantidad equivalente a lo que consume un televisor en color encendido las 24 horas del día durante 3 años.
Los investigadores en el tema aseguran que en Chile las centrales eólicas pueden ser viables en aquellas zonas que tengan regímenes de viento apropiados, donde se puedan aprovechar las cumbres elevadas, las áreas cordilleranas abiertas y los efectos de relieve. Es el caso, por ejemplo, del sector costero de la IV Región, las estaciones antárticas y las pampas patagónicas.
Actualmente, las aplicaciones de la energía eólica se centran en la obtención de electricidad, la cual se genera en las centrales eólicas a partir del movimiento del viento. Estas instalaciones suelen ser amplias y cuentan con un tipo especial de molinos: las turbinas eólicas, aspas finas de rotación muy rápida. En paralelo el eje de las aspas, un mecanismo acciona un generador eléctrico que transforma la energía mecánica en energía eléctrica. Con una turbina eólica de 4,5 m de diámetro se puede conseguir almacenar unos 5000 kW/h de energía eléctrica; cantidad equivalente a lo que consume un televisor en color encendido las 24 horas del día durante 3 años.
Los investigadores en el tema aseguran que en Chile las centrales eólicas pueden ser viables en aquellas zonas que tengan regímenes de viento apropiados, donde se puedan aprovechar las cumbres elevadas, las áreas cordilleranas abiertas y los efectos de relieve. Es el caso, por ejemplo, del sector costero de la IV Región, las estaciones antárticas y las pampas patagónicas.
Me parece interesante lo de las energías alternativas, como por ejemplo el viento. Es una lástima que se aproveche tan poco ese recurso en Comodoro, ya que los molinos que tanto dinero costaron actualmente no los veo funcionar.
ResponderBorrar